Todos los usos de la leche en el huerto y el Jardín – Fertilizante, Fungicida y Más

¿Sabías que la leche puede utilizarse como fertilizante? Además de ayudar en el crecimiento de la planta, fertilizar a las plantas con leche también puede aliviar muchos problemas en el huerto, desde deficiencias de calcio hasta virus y mildiú polvoriento.

Veamos cómo aprovechar los beneficiosos nutrientes que tiene la leche.

Beneficios de usar leche como fertilizante

La leche es una buena fuente de calcio , no solo para los humanos, sino también para las plantas. La leche de vaca cruda o no pasteurizada tiene, para las plantas, las mismas propiedades nutritivas que tiene para los animales y las personas.

La falta de calcio puede notarse cuando las plantas se ven atrofiadas y no desarrollan todo su potencial.

La leche contiene proteínas beneficiosas, vitamina B y azúcares, todo esto, muy bueno para las plantas, porque mejoran su salud general y el rendimiento de los cultivos.

Lo interesante de estos nutrientes presentes en la leche es que son una fuente de alimento para los microorganismos benéficos del suelo. O sea, estos nutrientes contribuyen a aumentar la población de estos microorganismos y, en consecuencia, mejora la calidad del suelo.

Beneficios de usar leche como fungicida y repelente de pulgones

El uso de la leche como fungicida es muy efectivo sobre todo contra el mildiu polvoriento.

La leche se aplica en forma de spray foliar y actúa de 2 maneras. Por un lado, es germicida, esto es, mata las esporas fungicas. Y por otro lado, esta leche aplicada sobre las hojas forma una película nutritiva que estimula la colonización de microorganismos benéficos, dejando poca superficie libre para la infección del hongo del mildiú

Además, la leche aplicada sobre las hojas hace que estas sean menos vulnerables al ataque de pulgones y mosca blanca, por lo que el uso de leche en el huerto sirve como preventivo de las enfermedades que estas plagas transmiten como el virus del mosaico.

Desventajas de aplicar leche a las plantas

Junto con los beneficios de usar la leche como fertilizante, es justo también detallar sus inconvenientes:

  • Usar demasiada leche no es una buena idea ya que las bacterias que contiene se echarán a perder, lo que dará como resultado un olor fétido y un posible marchitamiento de la planta.
  • La grasa en la leche puede producir olores desagradables ya que se descompone también.
  • Los organismos fúngicos benignos que colonizan las hojas y degradan la leche pueden ser estéticamente poco atractivos.
  • Se ha informado que la leche descremada seca induce la formación de hongos en algunos cultivos (curcubitaceas y crucíferas).

Incluso con estos pocos inconvenientes, es fácil ver que los beneficios superan con creces los inconvenientes. Lo importante es aplicar respetando las cantidades y no abusar.

Como siempre, menos es más.

¿Cómo se debe aplicar la leche en las plantas?

¿qué tipo de leche se recomienda utilizar en el jardín? Idealmente, me parece que lo mejor es usar leche que ya pasó su fecha (excelente forma de reciclar), pero también puede usar leche fresca, leche en polvo y o la leche evaporada.

Una muy buena alternativa es aprovechar la leche que quedó en el envase vacío. Vuelves a llenar ese recipiente con agua y la mezcla del agua con leche es una buena mezcla para aplicar a las plantas.

Además, ese poquito de leche lo ibas a terminar botando a la basura así que el costo fue cero.

Es importante que diluyas la leche con agua. Y es importante que este agua no tenga cloro. Puede ser agua de lluvia, del aire acondicionado o agua de grifo reposada 24 horas.

Para máximo poder, mezcla una solución de 50 por ciento de leche y 50 por ciento de agua. Aunque  10% leche y 90% agua ya es suficiente.

Usa fertilizante de leche como un spray foliar , agrega la solución a una botella rociadora y aplícalo a las hojas de la planta.

  • Las hojas absorberán la solución de leche. Sin embargo, ten en cuenta que algunas plantas, como los tomates, son propensas a desarrollar enfermedades fúngicas si el fertilizante permanece en las hojas demasiado tiempo.
  • Aplica por la mañana para que las hojas se sequen lo más rápido posible
  • Para combatir el mildiu, aplica una a dos veces por semana.

También puedes aplicarlo con el riego como fertilizante del suelo.

  • La idea es aplicar mas o menos medio litro de leche por metro cuadrado de jardín. Siempre diluido en agua. Debes permitir que la leche penetre en el suelo.
  • Repite cada dos o tres meses, o rocíe una vez al comienzo de la temporada de crecimiento y otra vez durante la mitad de la temporada.
  • Vierte la mezcla de leche alrededor de la base de las plantas donde las raíces absorberán gradualmente la leche.
  • No trates el área con ningún tipo de pesticida químico o fertilizante después de aplicar el fertilizante de leche. Esto puede afectar los microorganismos que se alimentan de la leche anulando su efecto benéfico
  • Si bien puede haber un poco de olor de las bacterias que descomponen la leche, el aroma debe desaparecer después de unos días.